lunes, 20 de abril de 2009

A eira de abó


Ultimamente llegan voces alarmadas desde diferentes lugares de Sanxenxo que relatan como constructoras, promotoras y agencias inmobiliarias han multiplicado sus visitas por diferentes parroquias buscando "a eira do abó".

A eira. Ese trocito de terreno próximo a la casa en el que secularmente se mallaban los cereales, y se secaban las legumbres, y en el que hemos pensado todos los nietos a la hora de edificar la vivienda que será la morada de nuestras familias para el futuro. Pero ahora "nas eiras xa non pódese construir, iso acabouse". Esto es lo que se cansan de repetir a nuestros paisanos los representantes de más de cuatro constructoras y empresas inmobiliarias de reconocido prestigio en Sanxenxo. Y a continuación viene la oferta: como en la finca no se puede construir (y para demostrarlo está el recientemente aprobado Plan General de Ordenación Municipal de Sanxenxo), los sagaces promotores ofrecen al abuelo cambiarle un suelo, inútil hasta para alimentar a unos animales de los que paulatinamente nos hemos ido desprendiendo, por un piso (o la entrada para comprar un piso) en Sanxenxo . Eso quedará, al menos, a los nietos. O eso dicen los promotores a nuestros mayores….

Efectivamente, la situación es alarmante. La Ley del Suelo de la Xunta de Galicia y el PXOM de Sanxenxo hacen prácticamente imposible la vivienda unifamiliar en nuestro rural. El futuro es un piso, una estructura vertical en los núcleos donde esas mismas empresas, cuyos representantes ahora visitan a nuestros abuelos, acaparan el suelo urbanizable. Sobre todo en el corredor Sanxenxo-Portonovo.

Una marea especulativa recorre nuestros campos y montes en una frenética carrera de compra de terrenos. La proximidad de los comicios electorales acelera todos los procesos y estamos en puertas de asistir, impávidos e impotentes, al "todo vale" y "cuantos más metros, mejor". Posiblemente el desastre urbanístico de Sanxenxo esté firmando su revalida en estos momentos. ¿Que fue de ese modelo de construcción en horizontal, con casas bajas separadas unos metros del vecino, y con un "anaco de terra para as cebolas, a verdura e as patacas">Pero el futuro urbanístico de Sanxenxo, dicen, pasa por olvidarse del rural. Levantar una casita "na eira do abó" es cosa del pasado. Nos quieren hacer ver que el futuro pasa por comprar un piso en Sanxenxo-Portonovo. O eso, o irse a vivir al municipio cercano donde la vivienda está más barata. Pero, ojo: tambien en un piso, no en "a eira do abó"

Creemos que la vivienda rural es posible y deseable. Pedimos a los futuros munícipes que establezcan unas reglas urbanísticas de posible cumplimiento que permitan que los nietos podamos construir nuestras vidas en la tierra de nuestros abuelos. Las tierras de nuestros abuelos también deben servir para que los nietos podamos vivir en ellas, no solo para especular. La política de desarrollo urbanístico para Sanxenxo del actual regidor municipal, Telmo Martín (PP) es de sobra conocida. Basta con ver el PXOM y las inversiones realizadas en el Ayuntamiento por conocidos empresarios del sector. La política del suelo también es responsabilidad de todos. Nos jugamos el futuro de Sanxenxo

Y para eso están las urnas.

(Publicado en Dº de Pontevedra, Dº de Arousa, Faro de Vigo y La Voz de Galicia, en Septiembre de 2004)

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